martes, 30 de junio de 2009

El extraño caso de la niña que no envejece


Brooke Greenberg nació en enero de 1993, a las 36 semanas de gestación y con un peso de 1,84 kg, y es la tercera de las cuatro hijas del matrimonio. La pequeña tuvo un parto relativamente normal y, a pesar de que tuvo que ser operada para corregir una dislocación en su cadera, todo parecía ir bien en ella. Sin embargo, rápidamente se descubrió que no era así. Sus padres, Howard y Melanie, observaron desconcertados que su hija no crecía. Pasaban las semanas y Brooke seguía siendo la misma beba de siempre. Asustados, los padres de Brooke comenzaron a consultar a especialistas (endocrinólogos, principalmente) pero nadie pudo explicar cuál era el motivo de esta situación.

Han pasado más de 16 años y Brooke sigue teniendo el aspecto de una beba de poco más de 6 meses. No habla, hay que atenderla como si fuese un recién nacido, mide unos 70 centímetros de largo y ni siquiera puede alimentarse de forma normal. De alguna manera, su crecimiento está estancado y nada indica que esto vaya a cambiar en algún momento. Uno podría pensar que -dado que no crece- Brooke no se enferma, ni envejece. Lamentablemente esto no es así. Lo que sea que ocurre con su organismo, no la protege del deterioro físico. A lo largo de esta década y media de vida, la niña ha tenido severos problemas respiratorios, derrames cerebrales, úlceras e incluso un tumor que fue tratado con éxito.



Hasta el momento nada se sabe el origen de esta enfermedad, que ni siquiera tiene nombre ya que no se conocen otros casos parecidos. Los expertos han sido incapaces de encontrar una explicación para la extraña condición de Brooke, aunque el doctor Richard Walker, del Colegio de Medicina de la Universidad del Sur de Florida, sospecha que hay algún pequeño defecto en su ADN, algo que origina todo este desorden en su organismo.

Dejando de lado el drama particular de esta familia, uno puede especular las posibilidades si se lograse determinar exactamente en qué parte del código genético de la niña se encuentra la causa de su casi nulo crecimiento. Si se pudiese separar esta condición, supuestamente genética, no sería raro que encontremos una pista hacia el secreto de la eterna juventud. Si descubriésemos que el gen “X” puede “rediseñarse” para que nuestro reloj biológico avance tan lentamente, quizás podríamos vivir toda nuestra vida luciendo como adolescentes (e, incluso, vivir unos cuantos años más). Alguna clase de terapia genética, quizás utilizando como vector un virus modificado, podría efectuar el cambio en cada una de las células que componen el cuerpo de un adulto, y podría frenar de golpe nuestro normal proceso de envejecimiento. Habría que trabajar duro para evitar todos los efectos colaterales que hoy están minando la salud de la niña de los Greenberg, pero la recompensa bien valdría la pena.

Como sea, estamos bastante lejos de entender qué es lo que pasa en el cuerpo de esta pobre niña, y es muy posible que nunca comprendamos (al menos en un plazo de tiempo razonable) qué mal que la aqueja. Hoy por hoy, los médicos de Brooke no saben cuánto tiempo vivirá, pero están seguros de que, a pesar de que su cuerpo no crece, el deterioro físico (tarde o temprano) acabará con su vida.

Fuente:Neoteo

El primer procesador cuántico de estado sólido


A diferencia de sus contrapartes binarias, los procesadores cuánticos aprovechan las más increíbles propiedades del mundo subatómico para llevar a cabo su magia. Los dispositivos que basan su funcionamiento en la mecánica cuantica son capaces de estar al mismo tiempo en una cantidad teóricamente infinita de estados, lo que los hace ideales para resolver algunos tipos de problemas prácticamente inabordables mediante los microprocesadores binarios de toda la vida.

Según aparece publicado en la última edición digital de la revista “Nature”, un equipo de investigadores, liderado por el profesor de Física Aplicada de la universidad de Yale, Robert Schoelkopf, ha creado el primer -y rudimentario- procesador cuántico de estado sólido. La importancia de este logro radica en que es la prueba tangible de que es posible realizar el traspaso de información cuántica a través de un dispositivo de estado sólido. Se trata solo de un pequeño primer paso y, como el mismo Schoelkopf se encarga de explicar, que "por el momento nuestro procesador sólo es capaz de realizar algunas operaciones cuánticas muy simples". A pesar de sus limitaciones, el dispositivo puede ejecutar tareas básicas, como operaciones aritméticas o búsquedas de datos.

A pesar del carácter experimental y las limitaciones del dispositivo, los investigadores destacan que el prototipo es "el primer mecanismo cuántico que se asemeja y funciona de forma similar a un microprocesador convencional". El prototipo funciona mediante la superposición de “qubits” -lo equivalentes de los bits en el mundo cuántico, con estados diferentes. Los investigadores explican que este truco les "permite lograr una mayor capacidad de almacenamiento de información, a la vez que mejora la potencia de procesamiento".

Los investigadores fueron capaces de configurar un “bus cuántico” para que estos bits pudieran comunicarse entre sí, utilizando fotones que viajan a través de las vías construidas sobre un dispositivo de estado sólido. “Todavía estamos lejos de construir un ordenador cuántico práctico, pero esto supone sin duda un gran avance", aseguró el especialista. "Nuestro dispositivo puede realizar sólo unas pocas tareas muy simples […] pero es la primera vez que alguien hace funcionar un dispositivo electrónico cuántico capaz de funcionar como microprocesador."

Robert Schoelkopf contó con la ayuda de un grupo de físicos teóricos, como Steven Girvin y Eugene Higgins, que se encargaron de fabricar los qubits (quantum bits). A pesar de que cada uno de estos “bits cuánticos” se compone de millones de átomos de aluminio, funciona como si fuese un solo átomo capaz de ocupar dos estados diferentes de energía. Estos estados reemplazan a los "1" y "0" que son la base de todos los ordenadores convencionales. Schoelkopf cree que si bien demandará tiempo, su dispositivo será la base de los microprocesadores del futuro.

Fuente:www.neoteo.com

¿Por qué tenemos cinco dedos?



Detente a observar tu mano. No hace falta ser muy lúcido para darte cuenta de que ella está compuesta por cinco dedos, además de otros elementos como las huellas digitales (de las que hablamos hace poco), las líneas de la mano o las uñas. Pero quedémonos en los dedos. ¿Por qué tenemos cinco dedos? La respuesta es más una realidad evolutiva generalizada más que una solución lógica.

Si ampliamos el horizonte más allá de nuestra mano y lo comparamos con el resto del mundo animal, veremos que son varias las especies que cuentan con cinco prolongaciones de sus extremidades.

La pata del lagarto, la del gato o la del sapo, el ala del murciélago, la aleta de la ballena y, por supuesto, las manos del mono, cumplen con esta regla. Esto se debe a que todos ellos (mamíferos, pájaros, reptiles y anfibios) se agrupan dentro de una familia: los tetrápodos, cuya característica es el desarrollo de cinco terminaciones de la extremidad.


Derivación evolutiva más que excelencia humana, la mano de cinco dedos es común en el reino animal. Sin embargo, es en los seres humanos exclusivamente donde ésta adopta una forma peculiar que la convierte en la herramienta más eficaz creada por la naturaleza.

Hablo del pulgar oponible, que solamente en el caso de los seres humanos puede tocar la punta de sus restantes cuatro dedos, y a la vez alcanza una longitud considerablemente larga.

La conclusión es que los cinco dedos no nos son propios, sino que únicamente el pulgar oponible lo es. Lo que nos hace humanos es una leve diferencia, de significación gravitante, por supuesto.

Fuente:www.ojocientifico.com

lunes, 15 de junio de 2009

La adolescente más pequeña del mundo


Jyoti Amge, una niña India de 15 años de edad y que mide menos de 60 centímetros, es considerada la adolescente más pequeña del mundo y tratada como una celebridad en la ciudad de Nagpur.



Muchos vecinos de su comunidad piensan que ella es la reencarnación de una diosa. "Cuando les digo mi edad la gente no me cree, pero desde que tenía 3 años me di cuenta que era diferente a los demás".

Cuando se encuentra en clases, la pequeña Jyoti se asemeja más bien a una muñeca de juguete, y es que su peso es de 5.4 kilogramos, apenas un kilo y medio más de lo que pesó al nacer y su altura exacta se de 58 centímetros.



Además ha insistido en vivir su vida como una adolescente normal, lo que incluye asistir al colegio público de la localidad y realizar las mismas actividades que el resto de los jóvenes, según publica el Telegraph.

Los doctores señalan que la joven india tiene problemas con su glándula pitutaria, sin embargo no han logrado determinar de manera exacta su condición. Por su parte, ella asegura que no se siente diferente a los demás.

"Al principio me estresaba y no podía salir tanto, pero ahora me gusta ir a la calle y hablar con la gente. Me daba miedo ver que en la escuela todos eran tan grandes, pero ya estoy acostumbrada", señala Jyoti.

A sus quince años la pequeña dice que le gusta toda la atención que recibe debido a su condición. Incluso, asegura, le gustaría convertirse en actriz cuando sea mayor.

Su primer contacto con la farándula fue al aparecer en un video musical de la cantante de pop Mika Singh. "Mi sueño es aparecer en el cine", dice.

Fuente:http://www.eluniversal.com.mx

El Vigilante robotico de Tokio



Los japoneses finalmente han encontrado una forma de mantener a raya a la constante horda de monstruos que destruyen sus ciudades. ¡Una estatua gigante del popular robot del anime Mobile Suit Gundam! Este Gundam, que mide 18 metros de altura, fue construido por el grupo Green Tokio Gundam Project a modo de celebración del 30º Aniversario de la popular serie y para promocionar a Tokio para las olimpiadas de 2016.


Con 18 metros de altura, la estatua es una réplica exacta de Gundam, y está a escala perfecta 1:1. Esta gigantesca (y friki) obra de arte se comenzó a construir en marzo de este año y fue terminada hace muy pocos días. Los que quieran visitar esta maravilla, solo deben dirigirse al Parque Shiokaze en Daiba, al sureste de Tokio.

AQUI EL VIDEO .....



Fuente:http://www.neoteo.com

¿Por qué tenemos huellas digitales?


Uno de los elementos constituyentes de nuestro cuerpo que más interrogantes generan en relación con su función son las huellas digitales. La comunidad científica ha trabajado duro para comprobar la función de las mismas, y lejos de conseguir homogeneidad en las hipótesis, la ambigüedad parece ser la regla.

Una teoría publicada recientemente es la de Roland Ennos y Peter Warman de la Universidad de Manchester, quienes han cuestionado la teoría base al respecto de la función de las huellas digitales, la cual sostiene que éstas existen para hacernos agarrar los objetos con más firmeza.

Midiendo la fricción de los dedos con otras partes de la piel sin huellas, los investigadores ofrecieron la explicación de que las huellas nos ayudan a reducir la fricción con las superficies sólidas, pues ésta disminuye hasta en un 30%. Sin embargo, esta teoría no explica la función en sí de las huellas.


Existe otra teoría al respecto, la cual explica a partir de una mano mecánica con sensores táctiles, que las huellas digitales nos ayudan a potenciar al máximo nuestro sentido del tacto.

Finalmente, la cuarta teoría es complementaria a la teoría canónica de que las huellas digitales nos ayudan a agarrar mejor los objetos. Ésta sostiene que las huellas digitales nos sirven para limpiar el agua de nuestras manos, ayudándonos a agarrar mejor los objetos en las superficies húmedas.

Las teorías son más bien ambiguas, y poco consenso se ha logrado entre sí. Lo curioso es que resulta hasta irritante no saber para qué rayos sirve uno de los elementos más característicos del cuerpo humano.

Fuente:http://www.ojocientifico.com